6 beneficios de a base de plantas
Existe mucha evidencia que demuestra que una dieta basada en plantas es beneficiosa. Llevar una dieta basada en plantas significa concentrarse en consumir alimentos que se derivan principalmente de plantas. Esta dieta incluye verduras y frutas, así como cereales integrales, frijoles, nueces y semillas.
Sin embargo, una dieta vegetariana no significa que deba volverse vegetariano y nunca volver a comer carne o productos lácteos. Simplemente significa que está consumiendo más alimentos vegetales y menos platos que contengan productos animales. Un ejemplo de dieta a base de plantas es la dieta mediterránea. La esencia de la dieta mediterránea es comer alimentos vegetales con aves, queso, pescado y yogur. Esta dieta también incluye el consumo ocasional de carnes y dulces por semana.
Una dieta a base de plantas aún puede proporcionarle a su cuerpo las vitaminas, proteínas, carbohidratos y minerales que tanto necesita. También proporciona una gran cantidad de fibra dietética que ayuda a la digestión. Además de ser deliciosa, una dieta vegetariana puede traer muchos beneficios para la salud.
1. Reducir la inflamación
La inflamación generalmente ocurre como una reacción de su cuerpo cuando detecta un agente extraño, como bacterias invasoras, virus, químicos o polen. Su cuerpo está tratando de defenderse y, como resultado, envía un ejército de glóbulos blancos para combatir a los invasores o proteger el área afectada.
Sin embargo, a veces las personas padecen infecciones crónicas que se vuelven peligrosas para la salud pública. Enfermedades como la artritis, la diabetes, las enfermedades cardíacas y el cáncer pueden tener importantes consecuencias para la salud si no se tratan adecuadamente. No necesita necesariamente un fármaco para controlar la inflamación y puede ayudar a reducirla con una dieta adecuada.
Evite o reduzca los alimentos que pueden causar inflamación en su cuerpo. Estos alimentos pueden incluir carnes rojas, carbohidratos refinados como pan blanco, papas fritas, refrescos, margarina u otras bebidas endulzadas. Estos alimentos pueden aumentar su riesgo de desarrollar enfermedades crónicas como enfermedades cardíacas, diabetes y exceso de inflamación.
Varios estudios revelan que diferentes alimentos y bebidas tienen efectos antiinflamatorios. Estos alimentos incluyen verduras de hoja verde, nueces, almendras, tomates, aceite de oliva y pescados grasos como la caballa, el atún, el salmón y las sardinas. Además, frutas como naranjas, cerezas, fresas y arándanos también contienen propiedades antiinflamatorias.
2. Consuma más vitamina A
La vitamina A, el retinol y el ácido retinoico ayudan a mantener una buena visión, crecimiento, reproducción, división celular e inmunidad. También pueden proteger su cuerpo de los efectos de los radicales libres que se producen cuando los alimentos se descomponen y se exponen a productos de tabaco o radiación. Desafortunadamente, los radicales libres pueden aumentar el riesgo de cáncer y enfermedades cardíacas. Por eso es fundamental tomar la dosis recomendada de Vitamina A para proteger su organismo de estos radicales libres.
La vitamina A se puede encontrar en su dieta habitual cuando consume espinacas y otras verduras ricas en vitamina A. Sin embargo, es posible que a veces su dieta no le proporcione toda la vitamina A que necesita.
Entonces, si no obtiene la cantidad adecuada de vitamina A todos los días, considere tomar vitamina A en forma de chicle. Es muy cómodo, fácil de usar y viene en diferentes colores atractivos.
3. Descubra nuevas recetas
La comida vegetariana puede ser muy sabrosa. Mezclar diferentes verduras como brócoli, espárragos o calabacines y freírlas en una sartén. Asegúrate de no cocinarlo demasiado para que no se ablande ni se moje. También puede hervir otras verduras rápidamente para conservar su frescura natural y su textura crujiente.
Una dieta vegetariana no es solo para tus platos principales. También puede tener platos que no sean de carne como aperitivos y servirlos con salsas. Por ejemplo, mezcle lechuga, zanahorias, cebollas y tomates y haga una salsa de guacamole, hummus, yogur o tahini. Seguramente disfrutará de una comida de verduras frescas con el condimento adecuado.
4. Puede ayudar a perder peso
Comer alimentos vegetales puede ayudar a las personas a perder peso. Son ricas en fibra dietética que pueden ayudar en la digestión y hacer que se sienta lleno a la vez que le proporcionan los nutrientes necesarios. Una dieta basada en plantas puede garantizar que obtenga suficientes nutrientes y calorías incluso mientras intenta perder peso. Puede brindarle opciones más saludables que una dieta de carnes procesadas y comida rápida. Además, los alimentos a base de plantas pueden ayudarlo a combatir las infecciones.
5. Puede ayudar a tu cerebro
Muchas verduras de hoja verde como la espinaca, el brócoli, la col rizada y la espinaca son ricas en ácido fólico, vitamina K, luteína y betacaroteno, que se sabe que son nutrientes saludables para el cerebro. Varios investigadores también sugieren que una dieta basada en plantas puede ralentizar y reducir el deterioro cognitivo. Además, comer nueces, que son una buena fuente de ácidos grasos omega-3, también puede mejorar la memoria.
6. Posible prevención del cáncer
Comer alimentos vegetales puede ayudar a prevenir el cáncer. Por ejemplo, las verduras crucíferas, que son verduras de color verde oscuro, son una rica fuente de betacaroteno, vitaminas C, E y K, ácido fólico y fibra. Además, ayudan en la formación de indoles e isotiocianatos que pueden tener algunos efectos anticancerígenos. Ejemplos de verduras crucíferas incluyen berros, nabos, rábanos, repollo, coliflor, brócoli y bok choy.
Ponte saludable con las plantas
No es necesario que cambie su dieta actual de inmediato. En su lugar, comience por incluir la mitad de las porciones de verduras en sus comidas y aumente lentamente su ingesta a medida que se adapta a la dieta. También puede incluir guacamole, nueces y frutas en su dieta. Una vez a la semana, pruebe un plato de ensalada con verduras frescas como espinacas, apio y col rizada, y mézclelo con aceite de oliva o vinagre.